sábado, 1 de enero de 2011

Primeros auxilios ante una crisis asmática

Contrariamente a lo que se cree, la crisis asmática puede desencadenar la muerte del paciente si no es atendida a tiempo o si se la trata con métodos inapropiados. Es por eso que se requiere, para la atención de un evento tal, estar en conocimiento de algunos pasos básicos para evitar que la crisis empeore.


¿Cómo se puede distinguir un episodio de asma controlable de una crisis asmática que requiere tratamiento médico urgente?

Una de las calificaciones posibles indica que la crisis asmática se presenta con síntomas que no se aplacan con el uso de las medicinas convencionales. Sin embargo, la seguridad de esta calificación es solamente parcial, ya que hay cuadros asmáticos que son resistentes a la medicación de la que enfermo dispone habitualmente, pero no alcanzan la gravedad que suelen poseer las crisis.

Por eso, otra forma de distinguir un episodio curable de una cuadro de urgencia es la actitud del paciente con respecto a la misma.
En la gran mayoría de los casos, el cuadro de asma controlable se presenta con síntomas negativos pero que no detienen la actividad del paciente, ni se manifiestan verbalmente ni ameritan pedido de ayuda alguno.

Por eso, un indicio indiscutible de que los síntomas de asma se han agravado es cuando el enfermo detiene sus actividades, admite que se siente mal y pide ayuda, conductas que son una señal inequívoca de una crisis asmática severa, entendiendo como severa la crisis con peligro de paro respiratorio, hipoxia, cianosis, etc. (esta calificación no es excluyente pero marca la diferencia entre un episodio sin peligro y una crisis que pone al paciente en riesgo de vida).

Los procedimientos a realizar en caso de una crisis asmática se severa pueden dividirse en excluyentes y opcionales.
Entre los excluyentes podemos enumerar:

  • Pedir ayuda médica urgente, como primera medida. Las crisis asmáticas no se curan espontáneamente ni admiten demora.
  • Ignorar los consejos del tipo "esperemos un rato a ver cómo evoluciona" o "ya se le va a pasar", ya que se está frente a un paciente que va perdiendo minuto a minuto la facultad de respirar y requiere un tratamiento determinado. Por otro lado, el enfermo, que ya sabe que su episodio sólo se sana con una medicación específica, puede experimentar una profunda angustia si percibe que se está delegando en él mismo la curación de algo que no la tiene.
  • Explicarle, además, al enfermo que ya se pidió ayuda y
que, eventualmente, está en camino. Si la ayuda tarda mucho el paciente debe ser trasladado al centro asistencial más cercano sin demora.
  • Por ninguna razón, permitir que el paciente ambule, ni someterlo
a ejercicios tales como cantar, tocar la flauta o inflar un globo. Hay personas que piensan que este tipo de tratamiento puede curar una crisis asmática.
  • Por ninguna razón, permitirle que se acueste, ni siquiera de
cúbito ventral. El paciente debe permanecer sentado. La postura del cuerpo, los brazos y las piernas puede ser a su elección, pero debe permanecer sentado.
  • Por ninguna razón darle agua fría, mojarlo o bañarlo, ya que el contacto con el agua produce espasmos bronquiales severos que empeoran la crisis.
  • Evitar consejos sobre cómo debe respirar, ya que la respiración
terapéutica es contraindicada en crisis severas. Eso solamente angustia y fatiga al paciente, no le reporta ninguna utilidad y, además, no tiene margen para ejercicio terapéutico alguno porque sus vías respiratorias están completamente bloqueadas. El sabrá cómo respirar
Entre los recursos opcionales, pueden enumerarse los siguientes:
  • Evitar que hable; conviene formularle al paciente preguntas que se puedan responder por "sí" o por "no", es decir, que puedan responderse mediante señas.
  • Darle de beber té, café, mate, sopa o cualquier infusión caliente.
  • Aislarlo del resto de las personas y dejarlo al cuidado de
personas idóneas.
  • Evitar recriminaciones o muestras de temor.
  • Nebulizar al paciente, utilizando solución fisiológica. (es conveniente delegar en el médico el suministro de medicinas con más poder curativo)
  • Permitir que utilice su inhalador personal. Si bien estos inhaladores tienen diversos efectos colaterales si se usan en exceso, en una crisis asmática severa pueden representar para el paciente una sensación de seguridad y resguardo indispensable ante los síntomas que está experimentando.
Mas Informacion en http://www.todoenmedicamentos.com/